
No existe un tratamiento efectivo probado para la enfermedad del pulmón negro, aunque sus complicaciones sí pueden ser tratadas.
No existe un tratamiento efectivo probado para la enfermedad del pulmón negro, aunque sus complicaciones sí pueden ser tratadas.
La única manera de prevenirla, es no inhalar polvo de carbón, medida que en ocasiones puede significar que una persona abandone su trabajo.